Diputación Provincial de Murcia

1813

1982

Murcia (España)

Durante más de siglo y medio la Diputación murciana no contó con un local propio, peregrinando por diversos edificios de la capital en régimen de alquiler, compartiendo en ocasiones dependencias con organismos como el Gobierno Civil o el Consejo Provincial. La primera Corporación de 1813 se reunió en el convento jerónimo de San Pedro de La Ñora, en plena huerta, debido a una epidemia de fiebre amarilla que afectaba a la capital. Durante el Trienio se le concedido de forma provisional una habitaciones en la casa consistorial, a la espera de la habilitación de algunos edificios eclesiásticos (cárceles de la Inquisición, Colegio de la Purísima, un ala del Palacio Episcopal...). Entre junio y octubre de 1823 la Diputación trasladó su sede a la ciudad de Cartagena, ante el avance de las tropas del duque de Angulema. Durante el levantamiento de 1843 ocupó, con la Junta revolucionaria, dependencias del Palacio Episcopal. A finales de 1854, a causa de otra epidemia en la capital, en este caso de cólera, la Corporación y sus oficinas fijaron su domicilio en el ex-convento de Santa Catalina del Monte, en la pedanía de Santo Ángel. Durante el último tercio del siglo XIX continuó su peregrinaje por distintos inmuebles de la capital (Calle Frenería, nº 14, Calle del Crédito Público...) para instalarse en la Plaza Fontes a partir de 1889. A mediados del siglo XX tuvo su sede en el Palacio de la marquesa de Salinas (también conocido como del marqués de las Almenas o de Riquelme), en la calle Riquelme, nº 23, edificio que presentaba un estado semi-ruinoso. Por este motivo, en 1962 se trasladaría a la primera y única sede en propiedad con que contó la Diputación, el Palacio Provincial, levantado sobre el antiguo edificio del Hospital de San Juan de Dios, en la calle Teniente Flomesta, sede hoy de la Consejería de Economía y Hacienda de la Comunidad Autónoma.

Tras la promulgación de la Constitución de 1812 se constituyó en Murcia, en febrero de 1813, una Junta Preparatoria de la Provincia encargada de designar a los electores de los distintos partidos judiciales que debían votar en las elecciones del 5 de abril a los primeros diputados provinciales. La recién nacida Diputación, entre otras funciones, debía sustituir a la Junta Superior Provincial creada para combatir a los franceses. Este primer período concluyó con la vuelta al absolutismo de Fernando VII. Al triunfar el golpe de Riego se volvería a constituir la Diputación (mayo de 1820). Entre octubre de 1835 y febrero de 1836 funcionaría una Comisión de Armamento y Defensa de Murcia "en el ínterin se establece la Diputación Provincial", circunstancia que se produjo en esta última fecha. Durante los movimientos revolucionarios de 1840, 1843, 1854 y 1868 la Diputación de Murcia no desapareció al reconocer la superioridad de las distintas juntas provinciales revolucionarias. No ocurrió así durante el levantamiento cantonal de 1873: el 31 de julio de ese año la Junta Revolucionaria del Cantón Murciano ordenó disolver la Corporación Provincial, orden que fue efectiva durante quince días. Con motivo de la proclamación de la II República el mismo 14 de abril de 1931 un Comité Delegado designado por la Junta Revolucionaria Republicana se hizo cargo de la Diputación. Este comité sería sustituído por una Comisión Gestora interina. Durante parte de la Guerra Civil: entre marzo de 1937 y marzo de 1939 las funciones de la corporación las asumió el Consejo Provincial de Murcia. Desde septiembre de 1978 la Diputación se coordinó con el Consejo Regional de Murcia, órgano preautonómico encargado de preparar las transferencias del Estado a la futura Comunidad Autónoma. Al promulgarse la Ley Orgánica 4/1982, de 9 de junio, de Estatuto de Autonomía para la Región de Murcia, y constituirse la Asamblea Regional y la Comunidad Autónoma, quedó disuelta la Diputación Provincial, que celebró su último pleno el 3 de agosto de 1982.