El Archivo General de la Región de Murcia recibe el legado del arquitecto Pedro San Martín Moro, el descubridor del Teatro Romano de Cartagena
Gracias a la generosidad de sus herederos, recientemente ha ingresado en este Centro el archivo profesional de Pedro San Martín (Valladolid, 1921-Cartagena, febrero de 2013) que recoge toda su amplia actividad en defensa y recuperación del patrimonio arquitectónico y arqueológico de la Región de Murcia entre las décadas de los cincuenta y los ochenta del pasado siglo.
El legado está compuesto por más de doscientas cajas, que contienen proyectos de obras, informes arqueológicos, fotografías y planos originales de decenas de intervenciones, algunas tan emblemáticas como la recuperación del porche de San Antonio, la consolidación de la torre del Espolón, la colegiata de San Patricio y el palacio de Guevara, en Lorca; la excavación y conservación de la muralla y cementerio de la plaza de Santa Eulalia, distintas fases de restauración de la Catedral, monasterio de las Claras, iglesias de San Nicolás y La Merced, y ampliación del Museo Salzillo, en Murcia; la consolidación y restauración de los castillos de Mula, Moratalla y Jumilla; la intervención en la cubierta y descubrimiento de la fachada renacentista de la Iglesia de San Andrés de Mazarrón o el acondicionamiento como centros de uso cultural del mercado de La Unión, el antiguo ayuntamiento de Cehegín y el palacio del Almudí de Murcia.
A él se deben buena parte de las excavaciones arqueológicas llevadas a cabo en la ciudad de Cartagena (la llamada Muralla Bizantina, El Molinete, Anfiteatro Romano, Decumano, catedral antigua, necrópolis de San Antón y museo arqueológico, Torre Ciega…) que culminaron con el descubrimiento de los restos del Teatro Romano en 1988. También se le debe la construcción del Centro de Artesanía. Asimismo, colaboró en la protección de numerosos yacimientos arqueológicos en toda la provincia (Begastri, cuevas rupestres, etc.), y en intervenciones en provincias limítrofes, como Alicante o Almería.
Pedro San Martín estudió arquitectura en la Escuela Superior de Madrid, donde tuvo como maestro a Leopoldo Torres Balbás, antiguo conservador de la Alhambra y uno de los pioneros de la moderna restauración monumental en España. Tras aprobar las oposiciones como arquitecto del Ministerio de Hacienda, a comienzos de 1954 obtuvo su primer y único destino en Cartagena. Al poco tiempo comenzó a colaborar con la Dirección General de Bellas Artes como arquitecto auxiliar de la Séptima Zona del Servicio de Patrimonio Artístico Nacional, y posteriormente con la naciente Comunidad Autónoma, en los distintos proyectos de recuperación del patrimonio llevados a cabo en la Región, así como con el ayuntamiento de Cartagena, donde fue comisario local de excavaciones arqueológicas y director de su museo arqueológico municipal durante varias décadas. En 1997 recibió el premio a la labor profesional otorgado por el Colegio de Arquitectos de Murcia, entidad que le ha dedicado un reciente homenaje y una exposición retrospectiva.
Se ha comenzado a inventariar este rico fondo documental, testimonio del meticuloso trabajo realizado por Pedro San Martín y de un enorme valor para la conocer la Historia cultural de nuestra región.