Mutualidad Levantina de Funcionarios y Empleados de Administración Local

1944

1957

Murcia (España)

Los órganos regidores establecidos en la Mutualidad eran: la Asamblea General, el Consejo de Administración (Presidente y 14 vocales, 7 residentes en Murcia y 7 de otras demarcaciones, al menos uno de cada una, cargos todos ellos honoríficos, voluntarios y reelegibles, que se reunían cada dos meses), el Comité Ejecutivo (Presidente, Secretario, Interventor, Contador y Tesorero, con reuniones quincenales), los Delegados Provinciales y los Habilitados Locales (cargo retribuído con el 1% de la cuota de cada socio en su organización). Cada tres años, el último domingo de noviembre, se celebraba una Asamblea General ordinaria con el fin de elegir nuevos cargos en el Consejo de Administración, que se renovaba al menos en una mitad, seleccionada por sorteo (artículo 31 del reglamento de 1948).

Creada por Orden Ministerial de 6 de septiembre de 1944 era, según el artículo 1º de su Reglamento, una institución de previsión y socorros mutuos constituida por los funcionarios y empleados de plantilla de las Diputaciones y Ayuntamientos de las provincias de Almería, Granada, Murcia, Albacete y Alicante que lo solicitaran voluntariamente y que, en el momento de formalizar su ingreso en la misma, no tuvieran cumplidos aún los 50 años, salvo excepciones. Al parecer, no tuvo asociados más allá de la provincia de Murcia. Su domicilio social era la sede de la Diputación Provincial de Murcia (calle Riquelme, 25) a cuyo fuero debían someterse los socios para cuantos asuntos e incidencias pudieran surgir en su relación con la Mutualidad y no a cualquier otro Tribunal. Su asamblea constituyente tuvo lugar en Murcia, el 21 de septiembre de 1944. En la asamblea general extraordinaria de 31 de julio de 1956 se acordó la liquidación de la Mutualidad, debido a la falta de nuevas afiliaciones y al incremento de las bajas de los socios. Para ello, se nombró una Comisión Liquidadora encargada de devolver las cuotas. Esta asociación figura inscrita con el número 97 en el Registro Oficial de Montepíos y Mutualidades.

Los beneficios que la Mutualidad otorgaba a sus socios de número comprendían, con carácter obligatorio, anticipos por enfermedad (para sí o sus familiares, sin exceder de cierta cantidad y siempre reintegrables), subsidios por invalidez, jubilación, defunción, viudedad, orfandad y, con carácter voluntario, el subsidio de vida (artículo 3º del Reglamento de 1948).

La mayor parte de los socios de la antigua Mutualidad Levantina ingresarían en la MUNPAL tras su creación en 1960.